Ayer, día 1-julio-2023, tuvo lugar un acto público muy importante (“41 ACTO INSTITUCIONAL”) en el Colegio Oficial de la Psicología de las Palmas de Gran Canaria (COPLP). Fue un evento en el que se otorgaron varios premios y reconocimientos a colectivos y a personalidades.
A mí me cupo el honor y el orgullo de recibir el nombramiento de Colegiado de Honor, distinción que otorga la Junta de Gobierno del Colegio. Lo recibí de manos del Decano del COPLP, Francisco Javier Sánchez Eizaguirre, quien rezumaba satisfacción por la excelente acogida del acto y la apreciable muy buena relación con los colegiados y autoridades presentes. A él y a su Junta les agradecí, de corazón, esta gran distinción.
Confieso que, aunque yo estaba previamente informado, el acto me sorprendió muy gratamente, no sólo por el magnífico enclave y la gran cantidad de asistentes (más de 200), sino por la calidad de las alocuciones: conferencia inaugural y las palabras de agradecimiento de los homenajeados y premiados.
Por mi parte manifesté mi intención de justificar mi designación realizando un recorrido por lo que de mis ‘maestros’ había ido aprendiendo y practicando, más allá de las exigencias académicas de la licenciatura. Así, revisé lo recibido del Dr. José Antonio Ríos González (la vivencia de las consideraciones ‘sistémicas’ en los grupos humanos; 1970-75) de Ignacio Martín Poyo (creatividad y metáfora; 1979); lo de Luis Pelayo Rodríguez (la dimensión corporal; 1988); del Dr. Pedro Fernández Villamarzo y Mariví González Quintana (psicología profunda y autoconocimiento; 1999); mi formación en psicología-coaching (el mundo contenido en el lenguaje; 2005); y, finalmente resalté con énfasis mi formación en “Psicoterapia centrada en la persona”, durante dos cursos 2007-08, siguiendo la enseñanza y vivencia de Javier Ortigosa Perochena, mencionando las tres actitudes clave de C. Rogers (aceptación positiva incondicional, la empatía y la autenticidad). Al hilo de esas formaciones iba aludiendo algunas conductas que yo tuve. Aduje que ese breve recorrido que acababa de exponer, no exhaustivo (ver mi perfil en Linkedin), pudo haber valido como elemento de decisión para mi designación.
Seguro que también otro aspecto coadyuvante, dije, habría sido mi trayectoria como colegiado desde el año 1972 y como Vocal de la Junta de Gobierno del Colegio de la Psicología de Madrid (de 2009 a 2021), en la que impulsé la actividad de los colegiados de PTORH, reactivando la Sección de PTORH y hasta diez Grupos de Trabajo. Casi en paralelo fui elegido (2011 a 2019) Vocal de la Junta Directiva de la División de Psicología del Trabajo, Organizaciones y RRHH (PTORH), en la que el Decano del Colegio Oficial de la Psicología de las Palmas de Gran Canaria, Francisco Javier Sánchez Eizaguirre, era, a su vez el Coordinador. Y con ese motivo mantuvimos una estrecha relación profesional al hilo del funcionamiento de dicha División y en operaciones tan destacadas como la organización del Congreso Internacional de Psicología del Trabajo y RR.HH. (2016), siendo yo presidente del Comité de Organización y él Vocal del mismo. Añadí el impulso que dimos a la formación de expertos en certificación para la ISO 10667 (Evaluación de personas en organizaciones), y en el Certificado “EUROPSY Trabajo”.
Para acabar, mencioné brevemente dónde me encuentro actualmente en mis planteamientos: 1) Apuesto por la consideración de las organizaciones como una urdimbre de conversaciones, impulsadas y gestionadas por líderes, innovadores y humanistas que armonicen las ilusiones de todos los componentes de las mismas, poniendo a las personas en el centro. 2) Que las personas busquen en sus proyectos profesionales la empleabilidad indefinida (que depende de ellAs) y no tanto el empleo indefinido (que no depende de ellas). 3) Impulsar el Mentoring como vía de potenciar la psicología aplicada profesionalmente.
En Majadahonda, a 2 de julio de 2023
